A los compañeros del tren especial que es nuestra vida

lunes, 31 de agosto de 2015

Sólo un hasta luego Maestro!!!!!!.


Dicen que cuando se va un amigo, parte de tu vida, se va con él...Así me siento yo en este instante. 

El Dr. Wayne Dyer fue para mí, sin saberlo, motivo de inspiración, curador de heridas y propulsor de cambios importantes en mi vida emocional y espiritual. Sus libros me han acompañado, incluso en este viaje de más de 8.000 Km,que realicé, hace ya siete años, lo traje conmigo, sus libros, sus enseñanzas, sus vídeos.

El año pasado, buscando la forma de editar mi libro Mi Hijo Pródigo, le escribí solicitándole orientación, y como siempre, siendo un alma totalmente generosa, me ofreció la posibilidad de contactar a su editorial, y así llegar a publicarlo.

Este año, esperaba poder escribirle para contarle mis pequeñas hazañas, pero, motivos ajenos a mi voluntad, me hicieron postergar esa carta, una y otra vez, ahora él sabe por qué.

Creo, sin lugar a dudas, que deja un vacío enorme, pero sus escritos nos acompañarán por siempre, pues como dice una de mis amigas más queridas, ya lo entregó al Universo.

Continuaré leyendo cada uno de sus escritos, como digo siempre, pues cada vez que los leo, me da una bofetada diferente o un aprendizaje diferente, y siempre siempre, mi alma le estará eternamente agradecida por todo lo que nos dio, nos enseñó y seguirá enseñando.

Su obra no termina aquí, al contrario, ahora es que comienza realmente...

Dios lo bendiga y los guarde siempre. Dr. Wayne Dyer.

Con infinito amor y respeto.

Mireya Pérez R.




No hay comentarios:

Publicar un comentario